Me gusta mucho este estilo tan rítmico, esas frases que caen y parecen arrastrar a las otras, como si no te hubiese costado pulirlas.
El tema es interesante, más de lo que parece: todos tenemos nuestros dioses particulares, y no siempre les aniquilamos por nuestro gusto. Pero sí, los colectivos, los inflados por expectativas falsas, los protagonistas de la fama efímera que Warhol instaurase... esos hacen una triste ristra de imágenes distorsionadas.
Barcelona, 1965. Escritora y articulista. He colaborado en El País y ahora escribo una columna diaria de lunes a viernes en El Periódico y una columna mensual en la revista Woman. Tres novelas publicadas: EL HOMBRE QUE MATÓ A MESSI (Edhasa, 2015), CARTAS DESDE LA AUSENCIA (Seix Barral, 2008) y EL AMULETO DE PAPEL (Plaza & Janés, 2004). Y dos libros biográficos: A CONTRACORRENT (Edicions 62, 2011) sobre el alcalde Jordi Hereu y REFLEXIONS D’UN VELL CENTENARI (Edicions 62, 2011) sobre Moisès Broggi.
Me gusta mucho este estilo tan rítmico, esas frases que caen y parecen arrastrar a las otras, como si no te hubiese costado pulirlas.
ResponderEliminarEl tema es interesante, más de lo que parece: todos tenemos nuestros dioses particulares, y no siempre les aniquilamos por nuestro gusto. Pero sí, los colectivos, los inflados por expectativas falsas, los protagonistas de la fama efímera que Warhol instaurase... esos hacen una triste ristra de imágenes distorsionadas.
Un gusto leerte, como siempre.