miércoles, 7 de julio de 2010

Soy la chica que pasea por las calles de París. No es mi ciudad, pero podría serlo. Mis pasos aún no son sólo míos, pero pronto lo serán. Las lunas de los escaparates devuelven mi reflejo y yo las miro de reojo. Mi imagen es mi conquista. Un reto al futuro.
Arranco a correr y me río al sentir el aire. Pero al final de la calle me detengo en seco. ¿Y si una gárgola resentida me acecha a la vuelta de la esquina? Quizás un malvado Frollo o un triste y solitario Quasimodo quieran robarme mis pasos.
Miro alrededor y la libertad toma un regusto de abandono. Ya no sé si quiero seguir sola. Por unos segundos pienso en retroceder. Deshacer el camino y regalarme, de nuevo, un reflejo en los escaparates. Cierro un segundo los párpados. De un café cercano me llegan los ecos entrelazados de una docena de conversaciones. Dos enamorados discuten. Dos amigas se cuentan confidencias. Un grupo de jóvenes ríen. En el aire se trenza el aroma dulce de un crêpe y unas campanas cercanas anuncian el mediodía.
Abro los ojos. Inspiro hondo y sonrío. ¡Qué diablos! ¡Prepárate París, aquí te dejo la huella de mis pasos!
A la vuelta de la esquina, todo.
A la vuelta de la esquina, quince años.

9 comentarios:

  1. Cuando por fin conozca París, dedicaré un pensamiento a este álter ego. Gracias, Emma.

    I.

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  2. Haya lo que haya a la vuelta de la esquina, no le des más vueltas (ni esquinazo).

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  3. Querida Emma: No deja usted de sorprenderme con sus álter egos. Pero esta vez ha causado usted un auténtico cortocircuito en mi sistema emocional. No se alarme; me explico. Hace años, para ser preciso habría que decir décadas, yo tenía una hija en la primera adolescencia que dio los primeros sorbos de libertad en París. ¡Ah, París! Y a la vuelta de la esquina, efectivamente, estaba el infinito.
    Gracias, Emma.

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  4. No se pas en qui t'has inspirat, a mi m'ha encantat, suposo que a ella també.

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  5. A la vuleta de la esquina... todo, no sólo nuevas experiencias, sino tambien todo eso de la calle anterior que nunca se deja atrás, algo que estará y ha estado siempre.

    Rory.

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  6. Qué corto e intenso se me ha hecho!!!! Muy bonito.

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  7. Iván, Alberto, Guimaraes, Margarita, Rory y Daniel, muchas, muchísimas gracias por acompañarme en las palabras.

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  8. Mil gracias a ti mama! Ya lo sabes.

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  9. Hermosa conquista, la de una ciudad, la de uno mismo, cuando el tiempo todavía es infinito. Suerte para ella, felicidades a ti por tan bonitas palabras.

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